Moscú, .- La Justicia rusa aplazó hoy hasta el 22 de noviembre el juicio para prohibir el movimiento juvenil Vesná (Primavera), organizador de las protestas contra la movilización parcial decretada por el presidente, Vladímir Putin.
Durante la vista judicial a puerta cerrada en San Petersburgo, la defensa consideró infundada la acusación de la Fiscalía de que Vesná sea una «organización terrorista».
Los abogados de Vesná tendrán ahora más tiempo que conocer el caso, aunque la acusación se niega a entregarles el original de la denuncia por contener información secreta.
«Esto confirma el abuso de las prerrogativas procesales por parte de la Fiscalía de San Petersburgo», informaron los abogados al diario New Times.
Estos denuncian que para las autoridades el máximo «culpable de todos los males» es el proscrito Fondo contra la Corrupción del líder opositor, Alexéi Navalni, y, en segundo lugar, Vesná.
En su canal de Telegram, el movimiento insiste en que la legalidad de sus acciones está garantizada por la Constitución y la Convención Europea de Derechos Humanos.
«Siempre hemos luchado por defender los derechos y libertades estipulados por la Constitución rusa. Y seguimos haciéndolo, pese a todo», señala.
El Ministerio de Justicia incluyó a Vesná en la lista de organizaciones no registradas que actúan como agentes extranjeros y el Servicio Federal de Supervisión Financiera (Rosfinmonitoring), dedicado a la lucha contra el lavado de dinero y terrorismo, y la incorporó al listado de grupos terroristas y extremistas.
Vesná, un movimiento fundado en 2013 en San Petersburgo sobre la base de las juventudes de varios partidos opositores, se opone a la campaña militar rusa en Ucrania y aboga además por la alternancia del poder en el Kremlin.
Después de que el presidente ruso decretara el 21 de septiembre la movilización parcial para 300.000 reservistas ante el avance ucraniano en el este y sur del país vecino, Vesná organizó el mismo día una protesta a nivel nacional a través de su canal de Telegram.
También convocó otra manifestación pacífica para el 24 de septiembre. En ambas protestas fueron detenidas más de mil personas.
La movilización parcial, que ya ha concluido, fue muy mal recibida por los rusos, que se habían manifestado en su contra desde el inicio de las hostilidades en el país vecino en febrero pasado.
Según la organización de derechos humanos independiente OVD-Info, que hace un seguimiento de la persecución política en Rusia, desde el inicio de la intervención bélica rusa en Ucrania el 24 de febrero han sido detenidos en protestas contra la campaña militar cerca de 20.000 personas.
