San Sebastián,- La gala inaugural de la 70 edición del Festival de Cine de San Sebastián se ha celebrado esta noche en el Palacio del Kursaal con un guiño a sus orígenes, recordando la primera edición que tuvo lugar un 21 de septiembre de 1953.
Tras proyectar unas imágenes del NO-DO de aquel evento, los presentadores de la gala, los actores Loreto Mauleón y Paco León, han invitado a subir al escenario a un grupo de mujeres que participaron como bailarinas en aquella ocasión y recibiendo a los artistas, según han contado ellas mismas.
Aunque no les pagaban, han desvelado, a cambio podían asistir a las proyecciones de todas las películas del festival.
La gala ha contado con la presencia de la vicepresidenta tercera del Gobierno Nadia Calviño y el ministro de Cultura y Deporte Miquel Iceta y del equipo de la película inaugural que se ha proyectado a continuación, «Modelo 77» de Alberto Rodríguez.
Acompañado por el reparto que encabezan Miguel Herrán y Javier Gutiérrez, Rodríguez ha recordado con emoción la primera vez que participó en el festival presentando «El factor Pilgrim», hace más de dos décadas.
También ha subido al escenario el jurado de la sección oficial, presidido por el productor argentino Matías Mosteirín -tras la renuncia a última hora de Glenn Close- y compuesto también por la directora de casting francesa Antoinette Boulat, la directora danesa Tea Lindeburg, la escritora española Rosa Montero, el cineasta de Lesoto Lemohang Jeremiah Mosese y el islandés Hlynur Pálmason.
Mosteirín ha apelado en su discurso a la capacidad del cine para luchar contra la intransigencia en un momento en el que «la sociedad está secuestrada por posiciones rígidas y vacías que nos dividen».
Y ha abogado por «combatir la intolerancia con el pensamiento crítico, celebrar la libertad, la contradicción y la capacidad de dialogar en la diferencia».
Durante la gala, que ha contado con las actuaciones musicales de Mikel Erentxun y Rocío Márquez y Bronquio, se ha entregado el Gran Premio Fipresci de la crítica a Ryûsuke Hamaguchi por «Drive my car», filme que también obtuvo el Oscar a la mejor película internacional entre otros muchos reconocimientos.
