Bangkok, (EFE).- El cantautor estadounidense James Taylor anunció hoy la cancelación del concierto que tenía programado en Manila en señal de protesta por la sangrienta política antidroga iniciada por el presidente filipino, Rodrigo Duterte.
«No pienso que mi música sea particularmente política, pero a veces uno está llamado a reafirmar una posición», señaló el cantante de 68 años en un mensaje publicado en su perfil de la red social Facebook.
Taylor, quien en su juventud fue adicto a la heroína, rechazó las medidas punitivas contra drogadictos y narcotraficantes iniciadas por Duterte, conocida como la guerra contra las drogas, que se ha cobrado la vida de más de 6.000 personas en menos de seis meses.
«Los recientes informes de Filipinas sobre ejecuciones sumarias de presuntos delincuentes sin juicio o proceso judicial son profundamente preocupantes e inaceptables para cualquiera que ame el estado de derecho», señaló Taylor al anunciar la cancelación de la actuación que tenía programada para el próximo febrero.
Del total de víctimas, más de 2.000 muertes ocurrieron en operaciones policiales y las demás por las bandas de ciudadanos que se toman la justicia por su mano, según datos policiales.
Grupos de defensa de los derechos humanos, la ONU y la Unión Europea, entre otros, han criticado reiteradamente las violaciones de los derechos humanos cometidas durante la campaña.
A pesar de las críticas, el índice de aceptación de Duterte entre sus compatriotas ronda el 63 por ciento, según un sondeo publicado la semana pasada por Social Weather Stations (SWS), una de las firmas de encuestas más acreditadas de Filipinas.
El cantautor estadounidense definió la adicción a las drogas como un «problema mundial que daña seriamente al adicto y a la sociedad», y defendió la lucha siempre el amparo de la ley. EFE