Santo Domingo.- Decenas de barrios de la República Dominicana están hoy inundados por las torrenciales lluvias que caen sobre gran parte del país a causa de una onda tropical asociada a los remanente de la degradada tormenta Beryl, lo que provocó un caos en la capital debido a que importantes avenidas resultaron anegadas.
Debido a las intensas lluvias muchos sectores se han quedado sin energía eléctrica, lo que, además, afectó semáforos de importantes vías de la capital, complicando considerablemente el tráfico, que registró retrasos de hasta tres horas, según distintos reportes.
De acuerdo con un informe del Centro de Operaciones de Emergencia (COE), 22 provincias se encuentran en alerta, tres de estas en alerta roja (máxima), entre ellas la capital, Santo Domingo, por posibles inundaciones repentinas urbanas y rurales, crecidas de ríos, arroyos y cañadas, así como deslizamientos de tierra.
El informe, leído en rueda de prensa por el director del COE, Juan Manuel Méndez, agregó que 50 viviendas fueron afectadas por las lluvias, las cuales han provocado el desplazamiento de 104 personas a casas de familiares y amigos.
Asimismo, dos puentes resultaron afectados y dos localidades se encuentran incomunicadas.
Según la información, un hombre de nacionalidad haitiana resultó herido al colapsar la vivienda donde se encontraba a causa de la caída de un árbol por un deslizamiento de tierra en el sector La Flor del Café, en Santo Domingo.
El Teleférico de Santo Domingo, inaugurado en mayo, anunció la suspensión hoy de sus labores debido a las condiciones del clima.
En tanto, la distribuidora de electricidad Edesur informó de que 17 de sus 208 circuitos resultaron averiados, afectando principalmente Santo Domingo y San Cristóbal (sureste).
Según las autoridades meteorológicas locales, durante las próximas 24 y 36 horas seguirán ocurriendo aguaceros, tormentas eléctricas, algunas ráfagas de viento con mayor incidencia en las regiones este, noreste, sureste y centro del país, pero con menor incidencia en la parte suroeste, producido por la nubosidad que acompaña la onda tropical que se degeneró de la tormenta Beryl. EFE
mf/dmt
