Los New York Knicks dejaron una marca indeleble en la noche del martes al descender por un breve viaje en metro hasta Brooklyn y superar a los Nets, 108-103. En un encuentro electrizante, los fanáticos de los Knicks llenaron el Barclays Center, generando un ambiente ensordecedor mientras Jalen Brunson y Julius Randle brillaban con 30 puntos cada uno.
Fanáticos Devotos: El Impacto de las Ovaciones Pro-Knicks
La hinchada de los Knicks, conocida por su lealtad inquebrantable, convierte al Barclays Center en su segunda casa, creando una marea de cánticos a favor del equipo. Este apoyo incondicional, expresado a través de proclamas pro-Knicks, resonó en todo el recinto, eclipsando la respuesta de los fanáticos de los Nets.
Mikal Bridges, estrella de los Brooklyn Nets, expresó su consternación por la falta de respaldo de los fanáticos locales. Desde su mudanza de Nueva Jersey a Brooklyn en la temporada 2012-13, los Nets han luchado por construir una base de seguidores que pueda rivalizar con la ferviente fanaticada de los Knicks. Bridges comentó, «No es divertido sentir que estás en un partido fuera de casa, pero en casa. Eso no es divertido para nadie, para cualquiera aquí presente, para cualquier persona viva».
El Eco del Éxito: Randle Aplaudido, Bridges Desilusionado
Julius Randle, el destacado jugador de los Knicks, elogió a los fanáticos por su apoyo inquebrantable al equipo. «Fue encendido. Fue especial», dijo el pivote a través del New York Post. «Volteamos el juego. La multitud realmente se involucró. Fue genial escuchar los cánticos de los New York Knicks en el Barclays. Siempre es divertido».
En contraste, Mikal Bridges, la estrella de los Nets, expresó su descontento ante la aparente falta de respaldo. Desde la perspectiva del jugador, la sensación de jugar como visitante en casa mina la diversión del juego. Este contraste en las experiencias de Randle y Bridges arroja luz sobre la dinámica única entre los equipos de Nueva York y la importancia del apoyo local.
La Historia de Dos Equipos: Éxito y Frustración en Brooklyn
A pesar de la construcción de equipos talentosos en el pasado, con jugadores de renombre como Kevin Garnett, Paul Pierce, Joe Johnson, y más recientemente, Kevin Durant, Kyrie Irving y James Harden, los Nets aún no han logrado obtener un campeonato de la NBA. Este contraste entre el éxito individual y la ausencia de un título destaca una narrativa persistente de lucha y aspiración para los Nets desde su traslado desde Nueva Jersey.
