Sídney (Australia), El Legislativo de Australia bloqueó este jueves la construcción de la nueva Embajada de Rusia en Camberra, en las proximidades de la sede del Parlamento, por considerarla un riesgo a la «seguridad nacional».
El proyecto de ley para cancelar el contrato de arrendamiento de unos terrenos por parte de Rusia, presentado a primera hora de la jornada por el Gobierno, fue aprobado en poco más de una hora tanto en la Cámara de Representantes (Parlamento) como en el Senado.
«Esta acción es absolutamente necesaria para proteger los intereses de seguridad nacional de Australia», apuntó durante la sesión parlamentaria de hoy la ministra de Interior, Clare O’Neil.
Previamente, el primer ministro de Australia, Anthony Albanese, indicó que su Gobierno tomó la decisión tras una reciente reunión del comité de seguridad nacional que recomendaba rescindir el contrato de arrendamiento del terreno aledaño a la sede del Legislativo donde Rusia preveía construir la nueva Embajada en la capital australiana.
Según precisó Albanese, las autoridades australianas temían que la ubicación de la nueva delegación, a escasos 100 metros del Parlamento, presentara un riesgo «en términos de interferencia» política con las actividades del Legislativo del país oceánico.
La medida del Gobierno llegó después de que el Tribunal Federal de Australia invalidara el 31 de mayo una orden de desalojo emitida en agosto de 2022 por la Autoridad de la Capital Nacional de Camberra donde se argumentaba que Rusia había incumplido el plazo de tres años para construir su edificio.
La Embajada rusa suscribió el contrato de arrendamiento del nuevo terreno en 2008, mientras que recibió la aprobación para la construcción en 2011 con el objetivo de sustituir sus antiguas instalaciones de su sede en Camberra. Aunque 15 años después no ha finalizado la nueva edificación y permanecen en su sede anterior a unos tres kilómetros del Parlamento.
Australia ha condenado en diversas oportunidades la invasión rusa de Ucrania y ha aplicado sanciones contra más de mil líderes, empresarios y organizaciones de ese país, mientras ha enviado ayuda militar, una de las más significativas fuera de la OTAN, así como ayuda humanitaria.
