Sídney (Australia), (EFE).- El primer ministro de Australia, Anthony Albanese, calificó este lunes de «insólita» la decisión de X de negarse a retirar imágenes vinculadas al ataque con un cuchillo perpetrado la semana pasada por un adolescente contra un obispo en la ciudad de Sídney.
«Creo que es insólito que X haya decidido no cumplir y esté intentando defender su caso», dijo Albanese a periodistas en la ciudad de Mackay, en el noreste de Australia, al insistir en la responsabilidad social de las plataformas de internet en luchar contra la desinformación y los mensajes de odio.
«No se trata de la libertad de expresión, se trata de las peligrosas implicaciones que pueden ocurrir cuando las cosas que simplemente no son ciertas se replican y se convierten en armas con el fin de causar división», acotó.
El martes pasado, la responsable de la Comisión de Seguridad Electrónica de Australia, Julie Inman Grant, solicitó a las compañías de redes sociales X y Meta (Facebook e Instagram) eliminar imágenes del ataque y comentarios ofensivos en un plazo de 24 horas o de lo contrario afrontaría fuertes multas.
Pero, a diferencia de Meta, X publicó un comunicado el sábado en su cuenta corporativa para asuntos gubernamentales, asegurando que dichas publicaciones «no violan las normas de X sobre discursos violentos» y prometió impugnar la orden de la Comisión por considerarla «ilegal y peligrosa».
Albanese y otros políticos y organizaciones de su país han criticado a X por publicar estas imágenes, así como otros mensajes relacionados a otro ataque con cuchillo perpetrado el 13 de abril en un centro comercial del suburbio de Bondi, al este de Sídney, en el que murieron cinco mujeres, un guardia de seguridad y el atacante.
Tras este ataque, circularon en X y otras plataformas mensajes falsos o violentos, como unos que identificaban a un joven judío como el atacante, a pesar de que la Policía informó el lunes de que el autor era Joel Cauchi, un australiano de 40 años con problemas de salud mental.
Dos días después del apuñalamiento de Bondi, un joven de 16 años se lanzó con un cuchillo contra el obispo Mar Mari Emmanuel, de 53 años y líder de la iglesia asiria del Buen Pastor del distrito Wakeley, unos 30 kilómetros al suroeste del centro de Sídney, mientras oficiaba una misa retransmitida por internet.
Ese ataque, por el cual el menor fue acusado de terrorismo, motivó en la noche del 15 de abril unas revueltas de centenares de personas en los alrededores de la iglesia que pedían que les entreguen al supuesto atacante, que causaron dos agentes heridos y daños a los coches de la Policía y la propiedad.
