«Es una propaganda vil y corriente, no hay que tomarlos en serio, es pura publicidad para tratar de engañar a los ciudadanos de Estados Unidos, pero ya cada vez está más desgastada esta práctica tendenciosa, mentirosa, calumniosa, por eso no hay que tomarlo en serio», manifestó el mandatario en su rueda de prensa diaria.
El gobernante mexicano reaccionó a la propuesta de la Cámara Baja de Estados Unidos, de mayoría republicana, que aprobó el jueves una enmienda a los presupuestos del Departamento de Estado que cortaría programas de ayuda a México hasta certificar que las autoridades mexicanas colaboran para reducir el tráfico de fentanilo.
La propuesta tiene pocos visos de prosperar en el Senado, donde la mayoría es demócrata.
López Obrador argumentó que, “como hay elecciones en Estados Unidos, los partidos, candidatos o precandidatos utilizan estos asuntos delicados, lamentables, del uso y los daños que causa el fentanilo, así como el tema migratorio, con propósitos politiqueros».
«Y van a seguir con lo mismo y cada vez más atrevidos van a llegar a plantear que van a bombardear a México o cosas por el estilo, de risa, son muy ridículos», agregó.
Los roces entre México y Estados Unidos por el narcotráfico han crecido mientras ambos países se acercan a sus respectivas elecciones presidenciales en 2024.
El presidente López Obrador niega que en México se produzca fentanilo, mientras que Washington sostiene que los cárteles mexicanos fabrican esta droga sintética con precursores químicos que llegan de Asia, en particular de China.
El mandatario señaló que los congresistas estadounidenses deberían enfocar sus esfuerzos en un plan para atender a sus jóvenes para que tengan educación gratuita, trabajo y “amor”, “para que no consuman fentanilo”.
“Eso es lo que deberían estar haciendo, no echándonos la culpa a nosotros. Nosotros estamos ayudándolos todos los días, por razones humanitarias, porque sí nos preocupa la pandemia por el consumo de fentanilo en Estados Unidos», opinó.
«Y nos preocupa más y nos duele que pierdan la vida 100.000 jóvenes cada año en ese país por el consumo de fentanilo. ¿Y qué hacen ellos, los legisladores? Echarle la culpa a México, sin ninguna razón”, concluyó.