París, A menos de dos meses del 50 aniversario de la llegada de Pinochet al poder, la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, y el presidente chileno, Gabriel Boric, recordaron la dictadura de Chile en su encuentro de este jueves en la capital francesa.
El intercambio buscaba «rendir honor a los lazos que unen a Chile a la ciudad de París», y cuyo vínculo más profundo surge con el golpe militar de 1973, «una de las grandes tragedias del siglo XX», destacó Hidalgo al terminar la entrevista con Boric en el Ayuntamiento.
«Para toda mi generación, pero para mí también como hija de republicano español, ese momento marcó una ruptura y también una conciencia», añadió la alcaldesa.
Hidalgo recordó algunos de los momentos más duros de «una de las dictaduras más sangrientas de América Latina», en particular el exilio de cerca de 15.000 de chilenos en Francia, entre los que llegaron grandes referentes de la cultura como Robert Matta o el grupo Quilapayún, quien popularizó el lema «el pueblo, unido, jamás será vencido».
En recuerdo de Salvador Allende y el próximo aniversario del derrocamiento de su gobierno, el 11 de septiembre, Hidalgo regaló a Boric una placa conmemorativa de la plaza parisina que lleva el nombre del expresidente chileno. Para Boric, este gesto «es parte de los diversos homenajes que alrededor del mundo» se le hacen a Allende. «Sería bueno -puntualizó- que también lo veamos y lo apreciemos en Chile».
El presidente chileno mostró su voluntad de «hacer de este aniversario de 50 años del quiebre de la democracia en Chile un momento de encuentro entre los demócratas, sin verdades oficiales», en un momento en que hay amenazas contra los regímenes de libertades.
«Con la alcaldesa Anne Hidalgo nos une (…) la convicción profunda de que es a través de la democracia como tenemos que resolver nuestros problemas en la sociedad», subrayó.
Boric quiso reivindicar, además, «otros muchos temas» que unen a Chile y a París, que acogerán grandes eventos deportivos en los próximos meses: los Juegos Panamericanos 2023 de Santiago de Chile y los Juegos Olímpicos de París en 2024.
El presidente aseguró que ambas ciudades están colaborando para conocer cómo se preparan y acoger de la mejor manera las competiciones deportivas. Por su parte, Hidalgo contó haber seguido «con mucha admiración» el movimiento socialista en Chile en los últimos años y expresó su interés por el debate sobre la Constitución chilena, que ha puesto en evidencia «los grandes desafíos políticos de hoy y mañana».
