Ginebra, La Oficina de Derechos Humanos de la ONU dijo hoy que las informaciones que ha recogido indican que 23 personas han muerto y decenas quedaron heridas en las protestas que han tenido lugar en la última semana en Kenia. «Estamos alarmados por la violencia generalizada y las denuncias sobre el uso excesivo e innecesario de la fuerza, incluidas armas de fuego, por parte de la policía», dijo en Ginebra el portavoz del organismo, Jeremy Laurence.
La Comisión Nacional de Derechos Humanos de Kenia situó hoy en nueve el número de muertos en las manifestaciones convocadas por la oposición ante la subida de los impuestos sobre productos básicos. Laurence dijo que la ONU pide una investigación transparente sobre estos sucesos, que los responsables sean juzgados y que se tomen medidas concretas para evitar más víctimas.
Las movilizaciones tuvieron lugar en Nairobi y en varias localidades de los alrededores, así como en Mombasa (sur), Kisumu (oeste) y Kisii (oeste), lugares donde las fuerzas de seguridad emplearon tanto munición real como gases lacrimógenos para dispersarlas.
El organismo de derechos humanos también pidió a las autoridades que respeten y garanticen el derecho de los ciudadanos a reunirse pacíficamente, conforme está establecido en la Constitución del país y en las normas internacionales.
«La vigilancia policial de las protestas debe tener el objetivo de facilitar que se desarrollen de forma pacífica y cualquier uso de la fuerza debe estar guiado por los principios de legalidad, proporcionalidad y necesidad», señaló. «Las armas de fuego nunca se deben utilizar para dispersar protestas», enfatizó Laurence, quien abogó por la apertura de un diálogo nacional para buscar soluciones a los reclamos de la población.
