Según las investigaciones en curso, el agresor, de 34 años, sufría trastornos mentales y manía persecutoria y había abandonado el mismo viernes una institución psiquiátrica, donde ingresó unos días tras un intento de suicidio.
Poco después accedió al campus armado con un cuchillo y se lanzó primero contra un grupo de personas por las que se sintió acosado.
Hirió ahí a tres estudiantes, todos ellos de 22 años. A continuación ingresó en un aula, donde se impartía una clase ante un centenar de estudiantes, y se lanzó contra una docente, la mujer ahora fallecida.
Un grupo de estudiantes logró reducirlo y retenerlo hasta que llegó la policía, que acordonó el recinto y llamó, a través de Twitter, a evitar acercarse al campus hasta que se aclarase completamente la situación.