La Habana, (EFE).- El diario oficial cubano Granma indicó hoy que el músico colombiano Juanes fue víctima de una «encerrona» en Miami de Emilio Estefan, Willy Chirino y Raúl Alarcón, quienes intentaron infructuosamente presionarlo para politizar su concierto en Cuba, realizado el domingo pasado.
Granma señala que el productor Estefan, el cantante Chirino y el empresario Alarcón intentaron arrinconar al colombiano «con propuestas espurias que desnaturalizarían el carácter de un concierto que el propio Juanes pidió fuera ‘blanco’, sin alusiones políticas de ningún tipo».
El diario responde así a un artículo publicado por Alarcón un día antes del concierto en el periódico El Nuevo Herald de Miami, en el que afirma que en varias ocasiones fue convocado para reunirse con Juanes y otros ejecutivos y artistas de la industria musical, entre ellos Estefan y Chirino.
En ese texto, Alarcón señala que el propósito de las reuniones era convencer de buena fe a Juanes para que incluyera a varios artistas del exilio cubano que residen en Miami en el elenco del concierto «Paz sin fronteras» en La Habana, celebrado el pasado domingo.
«Alarcón sabe que la historieta que cuenta no es así. En realidad el convocante fue él, quien preparó, sin la menor gota de buena fe, una encerrona al cantante colombiano», señala Granma.
Añade que ese grupo quería «violar groseramente» el carácter «blanco» del espectáculo.
El rotativo también hace referencia a un vídeo divulgado en Miami en los últimos días, según el cual Juanes estuvo a punto de suspender el concierto en la isla por sentirse vigilado, en particular por un supuesto funcionario de la seguridad que lo seguía dentro y fuera del hotel.
Según Granma, se trata de un «vídeo doméstico manipulado» a partir del cual El Nuevo Herald «lanzó el bulo de la supuesta irritación de Juanes ‘por el control del régimen castrista'».
Sobre los detalles del incidente, el diario dice que «simple y llanamente el cantautor, a todas luces nervioso ante el reto que se había impuesto, tuvo un exabrupto en las primeras horas del domingo frente a los elevadores del Hotel Nacional, al confundir la identidad de una persona».
«De inmediato se le aclaró que se trataba del sommelier del Salón Aguiar, un joven pero experto trabajador de la instalación que únicamente se disponía a ofrecer su servicio», agrega.
El diario afirma que, después de las aclaraciones, Juanes se disculpó con el joven y con todos los trabajadores que fueron «testigos del breve y puntual desaguisado» en el Hotel Nacional de Cuba, donde se hospedaron los músicos del concierto.
La segunda edición del concierto «Paz sin fronteras» organizado por Juanes se realizó en La Habana con otros 14 artistas, tras causar una fuerte polémica en parte del exilio cubano en Estados Unidos, que consideró la iniciativa como un balón de oxígeno para el régimen comunista de la isla. EFE
