EFE- El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha emitido una amenaza sin precedentes al sugerir que podría detener el suministro de armamento ofensivo a Israel si este país decide invadir la ciudad de Rafah en Gaza. Biden reconoció que el armamento estadounidense ha sido utilizado para matar civiles en la Franja de Gaza y expresó su preocupación por la posibilidad de que se utilicen explosivos de gran potencia en áreas densamente pobladas.
Biden especificó que si Israel invade Rafah, dejará de enviar armamento ofensivo estadounidense, como artillería y bombas para cazas, pero seguirá suministrando material defensivo para el sistema antimisiles Cúpula de Hierro. Sin embargo, reiteró el compromiso de Estados Unidos con la defensa de Israel.
Estas declaraciones de Biden llegaron después de que el secretario de Defensa estadounidense, Lloyd Austin, confirmara que Washington había frenado el envío de un gran paquete de armamento debido a preocupaciones sobre su uso en áreas densamente pobladas.
Netanyahu ha expresado su deseo de invadir Rafah, argumentando que allí se esconden milicianos de Hamás. Biden ha expresado su desacuerdo con la estrategia de Netanyahu y ha dejado claro que Estados Unidos no apoyará operaciones militares en centros urbanos.
Estados Unidos es el principal proveedor de armas a Israel, con un 69 % de las armas importadas por Israel entre 2016 y 2023 procedentes de este país.
