Roma, (EFE).- El Geo Barent, barco humanitario de Médicos Sin Fronteras (MSF), rescató este viernes a 336 personas en tres operaciones distintas en el Mediterráneo central, donde se mantiene el flujo de quienes zarpan desde las costas del norte africano pese al invierno, y obtuvo permiso para desembarcarlas en Ravenna (norte).
Ravenna está en el norte del mar Adriático, a unos cuatro días de navegación de la posición actual de la nave, lamentó MSF en sus redes sociales.
El Gobierno de la ultraderechista Giorgia Meloni dejó de impedir el atraque de los barcos humanitarios en los puertos de Italia pero, les obliga a hacerlo en algunos lejanos, según las ONG para entorpecer su labor y los rescates de personas en el mar.
Lo mismo ha ocurrido con el barco de la ONG española Open Arms, al que las autoridades italianas enviaron al lejano puerto de Génova (noroeste) para desembarcar a los 63 inmigrantes rescatados.
El invierno, además, no ha terminado con el flujo migratorio desde la costa del norte africano y solo el miércoles llegaron 619 inmigrantes a la isla italiana de Lampedusa (sur).
Otros barcos humanitarios llevaron a cabo rescates como el Ocean Viking de la ONG SOS Méditerranée, que salvó el miércoles a 244 inmigrantes con tres operaciones en el Mediterráneo central y las autoridades italianas le han asignado el puerto de Bari (sur).
Mientras que el barco de la organización alemana Sea Watch salvó a 119 en el Mediterráneo el 24 de diciembre y los desembarcó en el puerto italiano de Marina Carrara (centro).
Y la «Sea Eye 4», con 106 inmigrantes, de los cuales 40 menores, se dirigirá al puerto italiano de Brindisi (sur) para ponerlos a salvo.
En lo que va de año desembarcaron en Italia 155.754 personas por el Mediterráneo, más del doble que las 67.040 del mismo periodo del 2021, según datos del Ministerio del Interior italiano actualizados a fecha de hoy, 29 de diciembre.
