Con un 44,6 % de las papeletas escrutadas, según datos de la Comisión Electoral, al partido gubernamental, Ley y Justicia (PiS), se le atribuye el 38,8 % de los votos, algo más del 36,6 % que obtuvo en la encuesta a pie de urna más reciente.
Por su parte, el principal partido de la oposición, la Plataforma Cívica de Donald Tusk, acapara el 27,4 % del apoyo electoral, frente al 31 % que le asignaban las encuestas a pie de urna.
Tercera Vía, la coalición centrista que aúna al Partido de los Agricultores y al proyecto Polonia 2050 de Szymon Holownia, consiguió, por ahora el 14,3 % de los votos, lo que supone un ligero incremento comparado con el 13,5 % de las encuestas, mientras que la Izquierda se conformará con poco más del 8,1 % de los votos, unas décimas menos de lo que apuntaban los sondeos.
El grupo radical ultranacionalista Confederación vio desplomarse sus esperanzas al obtener solo un 6,4 % del apoyo electoral en la encuesta a pie de urna, con pocas perspectivas de mejora y un 7,4 % de los votos contabilizados hasta las 12.24 del mediodía, hora local (+2 GMT).
Una coalición de todas las fuerzas de la oposición que lograrán presencia parlamentaria podría echar del poder al PiS, a pesar de su vitoria en número de votos, algo a lo que el líder de PO, Donald Tusk, se refirió como una posibilidad real al conocerse las primeras encuestas de anoche.
Este lunes el alcalde de Varsovia y destacada figura de PO, Rafal Trzaskowski, declaró a la prensa que «por supuesto» se dará un Gobierno de su partido con Tercera Vía, pero lo cierto es que todos los líderes de partido esperan a que concluya el recuento de votos y no ha habido aún declaraciones explícitas que proyecten un pacto.
Una vez se sepan los resultados de definitivos, el presidente Andrzej Duda encargará la formación de Gobierno a una fuerza política que, tradicionalmente, es la más votada, y a partir de ahí comenzará un proceso de tentativas de investidura que se podría prolongar durante dos meses o incluso desembocar en la convocatoria de nuevos comicios.