Bamako, .- El primer grupo de 135 emigrantes malienses repatriados desde Túnez después de solicitar el retorno voluntario por la campaña de detenciones que vive la comunidad subsahariana en el país magrebí, llegaron al aeropuerto de Bamako, donde les recibió el ministro maliense de Defensa, coronel Sario Camara.
Según informó el Gobierno de transición maliense en un comunicado y explicaron a EFE fuentes aeroportuarias, los migrantes aterrizaron este sábado en el aeropuerto internacional Modibo Keita de Senou y entre ellos había 25 mujeres y 13 niños.
Además del ministro Camara, al acto de recibimiento acudió una representación de otros cinco ministros del Gobierno de transición maliense, entre ellos el titular del departamento de Malienses en el Extranjero, Alhamdou ag Ilyene.
También asistieron miembros del Consejo Nacional de la Transición y el jefe de misión en Mali de la Organización Internacional de las Migraciones (OIM), Pascal Reyntjens.
Tras darles la bienvenida, el ministro de Defensa les garantizó ayuda para recuperar sus hogares y el titular de Malienses en el Extranjero insistió en que la lista de retorno voluntario está abierta a la embajada en Túnez y que todos los que deseen regresar, pueden registrarse.
Hasta el momento, 260 malienses se han inscrito en esa lista para solicitar el retorno.
Los malienses que solicitaron regresar a su país indicaron que estaban siendo objeto, tanto ellos como otros migrantes subsaharianos, de asaltos en Túnez, estigmatización y detenciones. Coincidiendo con los llegados de Túnez, este sábado aterrizaron en Bamako a bordo de un avión de Etiopian Airlines otros 51 malienses provenientes de Angola que también habían solicitado el retorno voluntario Se esperaban otras operaciones de repatriación en los próximos días.
La crisis migratoria en Túnez se intensificó la pasada semana cuando el presidente tunecino, Kais Said, describió a los subsaharianos como una amenaza demográfica contra la identidad «arabo-musulmana» y anunció medidas «urgentes» para abordar la migración irregular. El pasado febrero, el Foro Tunecino por los Derechos Económicos y Sociales (FTDES) denunció arrestos masivos como parte de una operación para «reforzar el tejido de seguridad y reducir el fenómeno de la residencia ilegal en Túnez».
Las redadas continuaron esta semana al tiempo que se multiplicaron las agresiones, acoso y expulsiones de inquilinos subsaharianos por parte de la población local.
El pasado 24 de febrero, el presidente de la Comisión (secretariado) de la Unión Africana, Moussa Faki Mahamat, condenó enérgicamente la «impactante declaración» de las autoridades tunecinas.
Mahamat pidió «tratar a todos los migrantes con dignidad, vengan de donde vengan, abstenerse del discurso de odio racista que podría perjudicar a las personas y priorizar su seguridad y sus derechos humanos».
