Nueva York, .- La ONU condenó este viernes el ataque perpetrado contra la Embajada de Azerbaiyán en Teherán, que causó la muerte de un empleado de la legación y heridas a otras personas y del que Bakú responsabiliza a Irán por no tomar las precauciones necesarias.
El portavoz de Naciones Unidas Stéphane Dujarric recalcó que los ataques contra instalaciones diplomáticas están «estrictamente prohibidos bajo la ley internacional» y que varias convenciones obligan a los países a hacer todo lo necesario para protegerlas.
Dujarric, en su conferencia de prensa diaria, trasladó las condolencias de la organización a la familia del fallecido y deseó una rápida recuperación a los heridos.
Al mismo tiempo, destacó la rapidez con la que las autoridades iraníes anunciaron la puesta en marcha de una investigación y confió en que los responsables sean perseguidos.
La Policía de Teherán anunció hoy el arresto del atacante, quien fue a la embajada con «sus dos hijos», y llevó a cabo el ataque por motivos «personales y familiares».
Mientras, el Ministerio de Exteriores de Azerbaiyán responsabilizó a Irán de lo sucedido y anunció la evacuación de empleados de la legación. Según Azerbaiyán, «la parte iraní, como país en el cual se encuentra la embajada, debió haber cumplido sus compromisos de garantizar la seguridad de la embajada y sus empleados previstos por la Convención de Viena sobre relaciones diplomáticas».
El portavoz de Exteriores, Ayján Gadzhizade, recordó que «anteriormente se registraron intentos de amenaza contra la misión diplomática azerbaiyana» y que plantearon «constantemente a Teherán la necesidad de tomar medidas para prevenir situaciones como esta y garantizar la seguridad de la legación de Azerbaiyán».
«Lamentablemente este acto sangriento muestra las graves consecuencias de no dedicar la atención debida a nuestros insistentes llamados en este sentido», subrayó la diplomacia azerbaiyana.
