Santo Domingo.- El cantante y compositor dominicano Gabriel lanzará en «todas partes» el 31 de mayo próximo «Morisoñando», volumen I, su nuevo álbum de estudio en el que está acompañado de auténticas leyendas del merengue como Johnny Ventura, Wilfrido Vargas, Fernando Villalona, Milly Quezada o Los Hermanos Rosario.
Su interés por dar a conocer a las nuevas generaciones la música de esos consagrados merengueros, lo impulsó a crear durante dos años y medio ese disco de 14 temas, incluido un único tema inédito de su autoría: «Cómo no amarte», a dúo con la puertorriqueña Olga Tañón.
«El concepto de ‘Morisoñando’ va dirigido a quienes no conocen a estas estrellas ni la historia de la música tropical, implementando elementos que, sónicamente hablando, conecten con una generación que ni siquiera consume ese tipo de música (…)», dijo a Efe Gabriel vía telefónica.
«Lo que busco es tener un material que honre a esos artistas con un nuevo estilo de merengue que respete su base auténtica, pero al que se le agrega elementos vanguardistas, acordes con la industria de la música actual», apuntó.
En esa producción -este mismo año lanzará el volumen II- también se escucha al artista cantar junto a otros merengueros tan afamados como Sergio Vargas, Alex Bueno, Eddy Herrera, el colombiano Fonseca y el puertorriqueño Elvis Crespo.
Preguntado sobre el tipo de música que realiza y los planes que tiene con el merengue y su evolución, su respuesta fue directa: «Considero que la calidad no tiene fecha de expiración. No es importante el género o el estilo, cuando una canción es buena y se realiza bajo los estándares de calidad, esa canción permanecerá en el tiempo».
«Cuando escucho a un José Luis Perales, a un José José, a un Alejandro Sanz y a un Juan Luis Guerra son artistas tan buenos musicalmente, que sus canciones pueden tener hasta 30 años y la gente conecta y se identifica. La calidad sobrepasa la prueba del tiempo», sentencia.
Gabriel afirma que trató con «mucha pasión» y «mucho amor» cada uno de los temas que grabó con sus afamados colegas, y puso como ejemplo que con Ventura interpretó «El tabaco», uno de los legendarios éxitos del experimentado artista, cuyo origen se remonta a los primeros años de la década de 1970.
Con Sergio Vargas «refrescó» el tema «La quiero a morir», mientras que con Villalona grabó «Confundido».
«Cada una de esas canciones quedaron espectaculares; estamos buscando que las generaciones actuales vuelvan y conecten con el género tropical, con las raíces latinas. El merengue le pertenece a Latinoamérica, no solo a República Dominicana y a Puerto Rico; hay mucha gente que consumió y todavía consume esa música», explica.
Del disco ya han sido lanzados el tema con la Tañón, así como «Colegiala» con Alex Bueno, y el mismo 31 de mayo tocará el turno a «Píntame» junto a Crespo.
«Mi propósito con este disco es lograr que muchos conozcan la grandeza del merengue, de lo que nuestro ritmo logró a nivel mundial; no se puede desconocer el peso de la gente que viene delante de uno y quise, simple y llanamente, agregar mi ‘semillita’, mi granito de arena para, digamos, volver a escuchar canciones conocidas, pero con un toque más fresco y actualizado», destaca el autor del éxito «A tan solo una hora».
Remarca sobre su interés de contribuir a que el merengue llegue a lugares «donde nunca ha entrado», y con ello retoma sobre que los jóvenes «no saben el peso de esos grandes artistas».
Luego del lanzamiento de su disco, el nominado a los Grammy Latinos y a los Premios Heat emprenderá una gira por ciudades de Estados Unidos como Nueva York, Miami y Los Ángeles, así como a Colombia, Costa Rica, Guatemala, Perú y, por supuesto, a su natal República Dominicana.
Durante la entrevista destacó el trabajo que realiza su compatriota Vicente García, a quien dijo admirar y respetar, y con el que alguna vez habló sobre realizar «algo juntos» en un futuro no muy lejano.
«Quiero que de mi música se hable dentro de 20 o 25 años. Si no trabajo con el propósito de dejar un legado, si mi trabajo no genera eso, entonces alto estoy haciendo mal», dice Gabriel al momento de despedirse.
