Bélgica.-Una mujer se ha convertido en la primera en el mundo en dar a luz a un niño sano después de que los médicos restauraran su fertilidad mediante el trasplante de tejido ovárico que fue extraído y congelado cuando era una niña.
La mujer, a quien se le había diagnosticado anemia de células falciformes cuando tenía 5 años y a los 11 años, necesitó un trasplante de médula ósea para tratar su condición de células falciformes.
Pensando en sus posibilidades potenciales de formar una familia, los médicos decidieron extraerle un ovario antes de iniciar el tratamiento cuando la paciente tenía 13 años y 11 meses de edad y congelaron fragmentos de tejido. 10 años después, los tejidos le fueron trasplantados y, tras una espera de 5 meses, la joven comenzó a menstruar y se quedó embarazada.
Con los exitosos resultados los médicos han asegurado que avanzan un futuro en el que los niños con enfermedades graves como el cáncer puedan encontrar una manera de tener bebés muchos años después.
«Este es un avance importante en el campo porque los niños son los pacientes que tienen más probabilidades de beneficiarse en el futuro».
«Cuando son diagnosticados con enfermedades que requieren un tratamiento que puede destruir la función ovárica, la congelación de tejido ovárico es la única opción para preservar su fertilidad.
