SANTO DOMINGO. El fallecimiento del director sinfónico, el maestro Carlos Piantini, le cambió el color del día a los artistas y músicos clásicos.
El laureado artista, que durante largos años dirigió la Orquesta Sinfónica Nacional murió en Port Jerris, Nueva York mientras dormía.
Piantini vivía en Lords Valley, Pennsylvania desde el año 2003. Anteriormente residía en Miami,
Piantini fue el primer director del Teatro Nacional residía en Pennsylvania junto a su esposa Yolanda Trujillo. Hace varios años que el antiguo director de la Orquesta Sinfónica Nacional estaba retirado de las actividades artísticas debido a problemas renales, que finalmente acabaron con su vida a la edad de 83 años.
El maestro José Antonio Molina, director de la Orquesta Sinfónica Nacional, así como los directores sinfónicos Dante Cucurrullo y Julio Dwint ponderaron los aportes de Piantini al desarrollo de la música culta.
Freddy Beras Goico, el maestro Jorge Taveras, el ministro de Cultura, José Rafael Lantigua y el dramaturgo Franklin Domínguez, director de Bellas Artes, se refirieron con pesar al acontecimiento.
José Antonio Molina considera que de la existencia del maestro Piantini constituyó una de las mejores noticias que ha tenido el arte dominicano en generaciones. «Pensar en la curva hermosa que él hizo al nacer en un sector humilde como San Carlos hasta llegar a una institución musical como violinista de la Orquesta Filarmónica de Nueva York, es algo extraordinario», reflexionó el actual director de la Orquesta Sinfónica Nacional.
Para reforzar su planteamiento, indicó que tuvo un desempeño extraordinario aquí y en el extranjero. «Creo que en lugar de estar compugidos, debemos celebrar el privilegio que tuvimos los dominicanos de tener a un artista de su calibre. Fue una persona visionaria, que le dio los mejores años de su vida a la Orquesta Sinfónica Nacional», refirió.
Valoró como positivo el hecho de que el Ministerio de Cultura designara la sala del Teatro Nacional «Eduardo Brito» con el nombre de Carlos Piantini.
José Antonio Molina guarda un grato recuerdo de Piantini.
Cuenta que fue él quien lo dirigió por primera vez en el país. «En esa ocasión él celebraba sus 50 años en el arte. Recuerdo que eso fue en la década de los años 80 luego de mi debut en Venezuela como director. Eso marcó el inicio de mi carrera profesional», dijo.
José Antonio Molina también lamentó la muerte de Francisco Golibart, quien durante largos años fue encargado de recursos humanos de la OSN, quien falleció el jueves.
Dewint, Freddy, Franklin, Lantigua, Dante y Jorge
El dramaturgo Franklin Domínguez, director de Bellas Artes dijo que el país está de luto.
«La desaparición física de una de sus grandes figuras musicales. Personalmente siento que hemos perdido a un viejo compañero y amigo, pero nos conforta saber que ha sido reconocido por su país, y que su labor trasciende como ejemplo para las futuras generaciones, explicó Domínguez.
Julio Dewint trabajó por largos años como director asistente de Piantini. Al reseñar su paso por el arte, lo definió como un ser extraordinario. «Él tuvo el privilegio de dirigir importantes orquestas sinfónicas. La primera vez que llegó a la Sinfónica permaneció unos 10 años como director. Ahí lo acompañé junto al maestro Rafael Villanueva. Esa fue una época en la que se rindió una extraordinaria labor».
Contó que tiene como mérito, llevar el merengue a las salas de conciertos. «El venció a los disidentes que no lo querían y gracias a él eso es posible. Tiene en su haber el hecho de que ha sido el que mayor cantidad de óperas ha dirigido. Su fallecimiento constituye una gran pérdida para el país».
El director y compositor Jorge Taveras lo definió como un gran músico clásico y popular. «Fue uno de mis grandes amigos y lamento mucho deceso».
El maestro Dante Cucurullo lamentó el tiempo que tuvo a su lado. «Trabajé muchos años a su lado y fue poco. El maestro Piantini es irrepetible, un artista de esos que nacen una vez», dijo.
Freddy Beras Goico fue un gran amigo de Carlos Piantini.
Cuando lo contactamos por poco sus palabras no fluyen. «Carlos fue mi amigo. Era un gran enamorado de la Sinfónica, tenía una mentalidad distinta. Apoyo el nuevo talento y un ejemplo de eso fue Remy Taveras a quien le gestionó su ingreso en la Sinfónica de Miami y allí obtuvo una beca».
Freddy Beras recordó que era tan visionario, que en una ocasión él lo invitó a dirigir la Orquesta Sinfónica Nacional para atraer al público. «No recuerdo el año, pero sucedió en el Teatro Nacional, incluso esa actividad mucha gente llegó a boicotearla. Dirigí los primeros tres movimientos de la ópera Carmen. Ese era Carlos, una persona que le dio mucha proyección al país en el mundo».
De su lado, el ministro de Cultura, José Rafael Lantigua lamentó profundamente el fallecimiento del violinista.
Honras fúnebres
Los servicios se llevarán a cabo el domingo y lunes en Milford, Pennsylvania en Stroyal Funeral Home. La misa será el martes en la mañana en St. John Neumann´s en Lord Valley PA. De acuerdo con lo informado, los restos serán cremados para posteriormente ser trasladados al país. El martes habrá una misa en Milford, Pennsylvania. Nació el 9 de mayo en el 1927. A la edad diez años hizo su debut profesional como violinista. Le sobreviven su esposa y sus hijos Susana, John, Vivian, Garry, Alberto, Blanca, Frank, y Jacqueline.
