Severo Rivera
Santo Domingo. Muchos pensaron que luego de que Danilo Medina encaminó con éxito sus acciones para la modificación de la Constitución de la República en el Congreso Nacional y lograr el coro de grupos de poder que lideran la economía apoyaran sus aspiraciones para ir por un nuevo mandato, transitaría por senderos de paz a lo interno del Partido de la Liberación Dominicana. Sin embargo, los acontecimientos han evidenciado lo contrario.
El choque entre el presidente de Danilo Medina y el expresidente Leonel Fernández, antiguo jefe de Danilo sigue firme. Los líos que se han desatado entre los aspirantes a candidaturas congresuales y municipales en la próximas elecciones lucen complicadas. Por un lado, el grupo de Danilo Medina, que con la fuerza del poder tiene más posibilidades de maniobras trata por todas las vías, cerrarle el paso a los que forman parte de la facción de Leonel Fernández. Santiago, el Distrito Nacional, así como otras demarcaciones están en pleito porque entre los acuerdos de Leonel y Danilo se estableció que muchos repetirían en sus cargos, pero en otros escenarios se harían encuestas y de esa manera elegir a los candidatos a las elecciones del año próximo.
Las desavenencias entre los compañeros del PLD le tiene un gran ruido a la reelección de Danilo Medina y no es para menos. Recientemente un grupo dio como candidato a la Alcaldía de Santiago al señor Monchy Rodríguez, quien dirige los Comedores Económicos y de paso, se ha servido con la cuchara grande en el proceso de campaña en esa ciudad. Días después, apareció de frente, el presidente de la Cámara de Diputados, Abel Martínez, quien dijo que va por el cargo. Se sabe que Martínez siempre ha sido vinculado al grupo de Leonel Fernández. Sus aspiraciones le ponen otro color a Santiago y a las tensiones a lo interno del PLD…
En la capital se brega por sacar del medio a Roberto Salcedo, quien pretende un nuevo período, sin embargo, el precandidato Domingo Contreras, apoyado por Danilo Medina le está dando la batalla y aún no se sabe como terminarán los números.
Danilo Medina y sus seguidores calcularon mal. Pensaron que la gente de Leonel Fernández se quedaría con los brazos cruzados y no ha sido así. Es política y el control por importante cuota de poder.
Pero el PLD tiene tanta suerte, que la oposición no ha podido articular un discurso fuerte que le permita tomar partido de la debilidad que confrontan. Sin embargo, Danilo Medina, de quien se decía no necesitaba a nadie para ganar su reelección, negoció un acuerdo con con lo que quedaba del Partido Revolucionario Dominicano y hasta ahí hay serios problemas, pues a pesar de que ya se han hecho designación en la administración morada, todavía muchos esperan que se definan sus puestos electivos.
Los días dirán como quedará el escenario y la repartición.
