Santo Domingo, (EFE).- Los restos del expresidente haitiano Henri Namphy, de 85 años, quien falleció el pasado martes a causa de un cáncer en el norte de la República Dominicana, son velados hoy en una funeraria de Santo Domingo.
Al velatorio han acudido familiares y amigos de Namphy, quien, por decisión expresa, será sepultado en la República Dominicana, donde se exilió tras ser derrocado en septiembre de 1988 por Prosper Avril, según declaró a Efe su hija Melisa Namphy.
Los restos de ex teniente general son expuestos en un ataúd abierto, y al alrededor del mismo han sido colocadas varias coronas de flores y una foto del fallecido vestido con ropa militar.
El velatorio se realizará hasta mañana en la tarde cuando el cadáver será trasladado al Cementerio Cristo Redentor, en la capital dominicana, para su sepultura.
El fallecimiento de Namphy se produjo el pasado 26 de junio en el municipio de Jarabacoa, en el norte de República Dominicana, a causa de un cáncer de pulmón.
Tras conocerse su fallecimiento, el presidente haitiano, Jovenel Moise, expresó sus condolencias a la familia del ex teniente general, quien murió «después de una larga enfermedad» que combatió con «coraje», según escribió en su cuenta de Twitter.
Namphy, quien nació en Puerto Príncipe el 2 de noviembre de 1932, dirigió Haití desde el 20 de junio hasta el 17 de septiembre de 1988, tras un golpe de Estado contra Leslie Manigat.
Desde la salida del país del dictador Jean Claude Duvalier en febrero de 1986 y hasta la elección del presidente Manigat, en enero de 1988, encabezó el denominado Consejo Nacional que reemplazó al depuesto dictador, hijo del expresidente François Duvalier.
Estuvo al frente del proceso electoral, considerado fraudulento por observadores internacionales, que ganó Manigat en 1987.
Namphy, no obstante, encabezó el golpe de Estado contra Manigat en 1988 y más adelante fue derrocado por el general Avril.
El ex teniente general se exilió entonces en la vecina República Dominicana, que comparte con Haití la isla caribeña La Española, con su esposa y con su hija, y nunca volvió a vivir en su nación natal, precisó Melissa Namphy. EFE
