New York.- El legendario cantante estadounidense Lou Reed, que se sometió en mayo pasado a un trasplante de hígado, tuvo que ser hospitalizado de emergencia el pasado domingo en New York debido a una deshidratación, pero ya se encuentra «bien» y de regreso a casa, informaron medios locales.
El rockero se recuperó rápidamente y volvió a su casa este lunes después de haber sido ingresado el domingo a primera hora de la mañana en el hospital Southampton, que recibió una llamada de emergencia.
El miembro fundador de Velvet Underground no paraba de vomitar y los médicos temieron que se debiera a un rechazo al hígado que le fue trasplantado en mayo pasado en un hospital de Cleveland (Ohio), pero finalmente el malestar se debió a una deshidratación.
Hace un mes, el cantante aseguró en su página web oficial que se veía a sí mismo como «un triunfo de la medicina, la física y la química modernas» y que se sentía «más grande y más fuerte que nunca» después de esa operación, a la que se sometió tras un fallo hepático cada vez más agresivo.
Reed engrosó las filas del Salón de la Fama del Rock and Roll en 1996 y está considerado como uno de los mejores compositores de la historia gracias a clásicos como «Heroin», «Perfect Day» o «A Walk On The Wild Side».