La ministra de Agua de Nueva Delhi, Atishi Marlena Singh, inició una huelga de hambre indefinida el viernes pasado en protesta por la grave crisis de agua que afecta a la capital india desde hace semanas, responsabilizando a los estados vecinos por los fallos en el suministro.
En un acto en Nueva Delhi, Atishi declaró: «Como ministra de Agua, he agotado todas las posibilidades sin encontrar solución a este problema. He decidido luchar por la verdad. Me sentaré en ayuno indefinido. No comeré nada y solo beberé agua. Este ayuno continuará hasta que se satisfaga la sed de los 28 millones de habitantes de Nueva Delhi y se haga justicia».
La crisis se intensificó debido a que los estados vecinos, especialmente Haryana e Himachal Pradesh, no están proporcionando la cantidad acordada de agua a Nueva Delhi, exacerbada por una ola de calor extremo que ha alcanzado temperaturas cercanas a los 50 grados Celsius.
La falta de agua ha llevado a las autoridades a imponer restricciones severas en su uso, mientras los camiones cisterna que distribuyen agua potable son rodeados rápidamente por multitudes desesperadas con garrafas. Algunas personas incluso han escalado los camiones cisterna en busca de agua, reflejando la desesperación generalizada.
Además, la ola de calor ha tenido consecuencias mortales, con el ministro de Salud de la capital informando que 14 personas murieron recientemente por golpe de calor y más de 300 fueron hospitalizadas con síntomas de insolación. Sin embargo, según datos de una ONG local, el número de muertes entre personas sin hogar debido al calor podría ser mucho mayor, llegando a 192 en solo unos días.
Hoy, la ciudad experimentó sus primeras lluvias después del intenso verano, un presagio de las precipitaciones monzónicas esperadas en los próximos días.
La situación en Nueva Delhi sigue siendo crítica, con la ministra de Agua comprometida en su protesta hasta que se resuelva la crisis de agua y se satisfagan las necesidades básicas de los habitantes de la capital india.