Brasilia,.- El presidente argentino, Alberto Fernández, fue recibido este martes por su homólogo brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, con quien discutirá alternativas para reforzar el comercio bilateral, en medio de la severa crisis de divisas que enfrenta su país.
La reunión entre ambos mandatarios se celebra en el Palacio de la Alvorada, residencia oficial de la Presidencia brasileña, donde Lula y Fernández están acompañados por varios de sus ministros.
El objetivo de la cita es, según ambos Gobiernos, negociar mecanismos que permitan incrementar el comercio bilateral y, en especial, incentivar las exportaciones de Brasil hacia Argentina. Lula ha recibido a Fernández junto a su ministro de Hacienda, Fernando Haddad, el canciller, Mauro Vieira, otros funcionarios del Gobierno y el presidente del Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES), Aloizio Mercadante.
Esa institución sería la encargada de financiar las exportaciones brasileñas a Argentina mediante operaciones realizadas en monedas locales, lo cual facilitaría que el Gobierno de Fernández fortalezca las menguadas reservas en dólares de su país. No obstante, uno de los obstáculos señalados por el BNDES son las garantías que Argentina ofrecería para esas operaciones, que deberán ser estudiadas durante el encuentro.
Haddad dijo antes de la reunión que unas 200 empresas brasileñas «no están exportando» o no han cobrado por operaciones ya realizadas y «están con el valor de esas exportaciones retenido en Argentina en virtud de la falta de divisas». Apuntó que la intención es colaborar para que Brasil «no pierda espacios» en el mercado argentino, pero con las debidas garantías de pago, que «están siendo estudiadas».
Fernández ha llegado a la capital brasileña con el canciller, Santiago Cafiero, y una nutrida delegación en la que, curiosamente, coinciden tres probables aspirantes a la Presidencia en los comicios del próximo octubre. Se trata del jefe de Gabinete, Agustín Rossi, el ministro de Economía, Sergio Massa, y el embajador en Brasil, Daniel Scioli, que pueden medirse en las internas peronistas de agosto, en las que Fernández no participará, pues ya ha anunciado que no aspirará a la reelección.
La Presidencia brasileña ha informado que, hasta el momento, no está prevista una comparecencia de los mandatarios ante la prensa y ha dicho que, tras la cita de trabajo, Lula ofrecerá una cena a la delegación argentina en el mismo Palacio de la Alvorada.
