La Habana,- Cuba reportó este miércoles 893 nuevos casos de covid-19 y dos fallecidos y acumula en dos días de febrero 1.937 confirmados tras el máximo de contagios notificado la víspera, en medio de la tercera ola de la enfermedad.
En enero la isla registró más casos que en todo el 2020 con 12 récords de positivos diarios. El total de enfermos en 10 meses de pandemia asciende a 29.529 y los fallecidos a 220, tras los dos nuevos decesos reportados en la última jornada, según el Ministerio de Salud Pública (Minsap).
De los 893 positivos del miércoles, detectados tras procesar 17.076 pruebas PCR, 832 son casos autóctonos y 34, importados.
En hospitales cubanos hay internadas 12.858 personas: 5.563 casos activos -33 en estado crítico y 25 graves-, 3.315 con síntomas sospechosos y 3.980 bajo vigilancia epidemiológica.
Por provincias, La Habana y las orientales Guantánamo y Santiago de Cuba siguen reportando la mayor cantidad de casos diarios con 492, 138 y 82, respectivamente.
Esas tres provincias concentraron el 70,8 % de los nuevos contagios detectados en Cuba en la última semana, según cifras divulgadas el martes por el ministro cubano de Salud Pública, José Ángel Portal.
Casi todas las provincias cubanas retrocedieron en la desescalada y mantienen desde hace varias semanas medidas restrictivas para frenar los contagios, entre ellas el cierre de los centros educativos, bares, restaurantes y playas, así como restricciones en el horario del transporte público y limitación de los traslados interprovinciales.
De las dieciséis regiones cubanas (15 provincias y el municipio especial de Isla de la Juventud) solo permanecen en la etapa de «nueva normalidad» las provincias de Sancti Spiritus, Las Tunas y Granma.
Cuba desarrolla cuatro candidatos a vacunas para la covid-19, que están en una fase intermedia de ensayos clínicos y el Estado no ha adquirido dosis en el mercado internacional.
Autoridades de salud cubanas anunciaron que producirán hasta 100 millones de dosis de su vacuna autóctona en los próximos meses, lo que cubriría la inmunización del total de la población cubana (11,2 millones) y posibilitaría la exportación a terceros países.
