Lisboa,- El presidente de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa, dijo hoy que se está ponderando un estado de emergencia diferente al que se declaró en marzo, más limitado, y que hay una mayoría política «clara» que lo apoya.
«Es una mayoría que está en los dos tercios o más de dos tercios (del Parlamento). Es una mayoría clara, de revisión constitucional», dijo hoy en una entrevista a la cadena pública RTP, horas después de que el primer ministro, António Costa, le pidiese que declarase el estado de emergencia.
El jefe del Estado luso, que se reunió hoy con todos los partidos del hemiciclo para conocer su posición, explicó que el estado de emergencia que se está estudiando es «muy diferente» al que estuvo en vigor entre el 19 de marzo y el 2 de mayo: «muy limitado, con efectos sobre todo preventivos».
«Es esta la inclinación de los partidos que oí, vamos a ver si es también la de los actores económicos y sociales, pero es la inclinación del propio Gobierno», señaló el presidente, que en los próximos días se reunirá con sindicatos, patronales y organizaciones económicas.
Y será más limitado porque la situación ha cambiado: «Hace ocho meses la economía estaba bien. Ahora no está bien», dijo, y consideró también que la capacidad de respuesta sanitaria «es muy superior» a la que había cuando estalló la pandemia.
También ha cambiado la sociedad, que «está en gran medida fatigada», consideró Rebelo de Sousa, que recordó que incluso hay «posiciones negacionistas».
El presidente mantuvo este lunes encuentros con todos los partidos con representación en el Parlamento para evaluar sus posiciones.
Además de los socialistas, que gobiernan en minoría, la segunda mayor formación, el Partido Social Demócrata (PSD, centro-derecha), se mostró disponible para apoyar el regreso a la emergencia.
Los dos partidos suman 187 de los 230 diputados totales, lo que sería más que suficiente para que la propuesta prosperase en la Cámara, ya que, aunque la declaración del estado de emergencia compete al presidente, es necesaria la luz verde del Parlamento.
A la izquierda del hemiciclo, varios partidos mostraron dudas y los comunistas rechazaron de lleno apoyar la medida.
El primer ministro pidió este lunes a Rebelo de Sousa que declarase un estado de emergencia «esencialmente preventivo» para tener un soporte jurídico que le permita tomar más medidas para combatir el coronavirus.
En caso de decretarse un nuevo estado de emergencia, el Gobierno propone que dure más de 15 días y se aplique a los municipios en los que entrará en vigor el próximo miércoles el confinamiento parcial anunciado el sábado por Costa, que afectará al 70 % de la población del país, incluidas Lisboa y Oporto.
