Beirut,- El fiscal general libanés, Ghassan al Khoury, tomó declaración este lunes a responsables de los aparatos de seguridad del Estado en relación con la explosión que el pasado día 4 causó 158 muertos y unos 6.000 heridos en Beirut.
Al Khoury tomó testimonio al director general del Servicio de Seguridad del Estado, general Tony Saliba, en el Palacio de Justicia de Beirut, según informó la estatal Agencia Nacional de Noticias (ANN).
Varios países, organizaciones, políticos y libaneses de a pie han llamado al lanzamiento de una pesquisa internacional sobre la explosión de 2.750 toneladas de nitrato de amonio que llevaban seis años almacenadas en un almacén del puerto.
Sin embargo, el presidente libanés, Michel Aoun, «consideró que la demanda de una investigación internacional sobre el caso del puerto tiene como objetivo perder el tiempo, y el Poder Judicial debe ser rápido y sin apresurarse confirmar quién es un culpable y quién es inocente», según informó su oficina.
El presidente francés, Emmanuel Macron, que visitó la capital libanesa dos días después de la catástrofe, pidió a las autoridades del Líbano efectuar una investigación independiente, en la inauguración el domingo de una videoconferencia internacional de donantes para apoyar a Beirut.
«Este ofrecimiento de ayuda incluye igualmente un apoyo a una investigación imparcial, creíble e independiente sobre las causas de la catástrofe. Es una petición fuerte y legítima del pueblo libanés. Es una cuestión de confianza. Los medios están disponibles y deben ser movilizados», dijo.
El Ejército libanés ha dado por concluida la primera fase de las labores de búsqueda y rescate.
Además de dejar 158 fallecidos, miles de heridos y decenas de miles sin hogar, la deflagración ha reavivado las protesta iniciadas en octubre pasado para pedir la dimisión de toda la clase dirigente y han llevado a la dimisión el domingo de dos ministros del Gabinete de Hasan Diab.
La ya existente crisis política continúa exacerbándose con la renuncia de varios diputados, ministros y responsables públicos.
