Berlín,- El grupo de expertos económicos que asesoran al Gobierno alemán vislumbró este martes una perspectiva de pronta recuperación, ya este verano, a pesar de confirmar su pronóstico de caída drástica del PIB, que no volverá a niveles prepandemia hasta 2022.
En su opinión, el producto interior bruto (PIB) de Alemania retrocederá un 6,5 % este año, dos décimas más que las previsiones del propio Gobierno, que ha anunciado varios paquetes económicos en las últimas semanas para intentar contrarrestar las consecuencias de la COVID-19.
El consejo asesor del Ejecutivo alemán, los llamados «cinco sabios», corrigen a la baja el pronóstico que habían presentado a finales de marzo con carácter extraordinario, cuando bosquejaron tres posibles escenarios, de los cuales el más pesimista preveía una abrupta caída en forma de «V», con una contracción de hasta el 5,4 % en su vértice.
«Está previsto que la pandemia de coronavirus produzca la peor recesión económica desde la fundación de la República Federal de Alemania. Sin embargo, esperamos que la recuperación comience a partir del verano», declaró el presidente del consejo, Lars P. Feld.
El lenguaje sigue siendo catastrofista, en línea con los peores augurios que rodean tanto el indicador de PIB como en los más recientemente conocidos de la producción industrial, el número de desempleados o las exportaciones, claves en la potencia alemana.
Para 2021 los sabios pronostican una recuperación gradual, con un crecimiento del 4,9% del PIB, por lo que la economía alemana no se verá restablecida al nivel anterior hasta 2022; la tasa de desempleo, según los «sabios» seguirá una trayectoria similar tras empeorar en los próximos meses.
En abril el Gobierno alemán adelantó que el retroceso del PIB esperado para este año es el mayor desde la crisis de 2009, cuando la economía se encogió un 5,6 %, y superior al pronosticado por los principales institutos económicos del país, que aquel mes la situaban «solo» en el 4,2 %.
Posteriormente corrigieron a peor sus pronósticos para situarlos en torno a una caída del 6,6 %.
Por comparar, en 2019 Alemania evitó la recesión al crecer su PIB un 0,6 %, después de avanzar el 1,5 % en 2018 y el 2,5 % en 2017.
Para 2021 las previsiones oficiales apuntan a una recuperación que permitirá a la economía alemana crecer hasta el 5,2 %, según las proyecciones gubernamentales, que ahora cuentan con una nueva mirada, menos dramática, de los «sabios».
En los últimos meses varios de los indicadores que muestran la temperatura de la economía germana entraron en negativo, y lo hizo especialmente el de la producción industrial, que ya en abril pasado registraba una caída interanual del 25,3 % y del 17,9 % sobre el mes de marzo, cuando comenzaron a notarse las consecuencias de la pandemia.
Este martes los «sabios» confirmaron que el impacto sobre el desempleo se traducirá en un incremento de 1,1 puntos sobre los registros de 2019: en 2020 el paro se espera que alcance el 6,1 % y el mismo nivel se mantendría en 2021.
Por el lado de los precios su informe indica que en 2020 habrá que esperar una subida del 0,6 % y que la recuperación se verá el año que viene, con un incremento del 1,6 %, todavía por debajo del 1,4 % de 2019.
En su valoración sin embargo, los «sabios» se cubren apelando a la «considerable incertidumbre» con la que deben mirarse sus previsiones.
Y, en concreto, mencionan que habrá que ver cómo evoluciona la pandemia. Y añaden: «Se espera que haya una fase de desarrollo económico bajo significativamente más prolongada si no se pueden mantener en niveles bajos las cifras de nuevos contagios».
Se refieren además a que para evitar eso habrá que lograr que se respeten medidas de «distanciamiento inteligente» para contribuir a mantener bajos los niveles de nuevos contagios y para compensar la incertidumbre que asediará tanto a empresas como a hogares.
En relación con el contexto europeo el consejo cuenta con que la economía de la zona euro en su conjunto siga un patrón similar, contrayéndose un 8,5 % este año y recuperándose un 6,2 % en 2021.
El informe de los sabios señala también que el gradual alivio de las restricciones sanitarias en Alemania y en países que son socios comerciales importantes, así como las medidas adoptadas para la estabilización y el estímulo de la economía, tendrán un impacto positivo.
