Dajabón.- Representantes de organismos de derechos humanos y defensores de inmigrantes en República Dominicana descartaron hoy que las autoridades dominicanas maltraten a los extranjeros ilegales cuando son arrestados para su deportación.
La Fundación Solidaridad Fronteriza y activistas de derechos humanos dominicanos y haitianos afirmaron que el proceso de repatriación de haitianos que no se acogieron al Plan de Regularización de Extranjeros se está ejecutando con «estricto apego» a los derechos humanos y las leyes y que no han observado repatriaciones de niños sin el acompañamiento de sus padres.
El coordinador de Solidaridad Fronteriza, Gustavo Toribio, manifestó que ese organismo monitorea esas repatriaciones y que ha observado que, contrario a otras épocas, ese procedimiento «ha mejorado mucho».
Según Toribio, a los inmigrantes detenidos por las autoridades migratorias y castrenses se les traslada a un centro de acogida y que antes de su deportación se confirma si tienen algún tipo de registro ó documento, y que eso es un avance.
Subrayó que anteriormente las deportaciones se hacían a cualquier hora y sin tomar en cuenta si esas personas vivían en el país de manera legal a irregular.
En cuanto a la denuncia del alto comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Zeid Ra’ad Al Hussein, de que niños de origen haitianos están siendo expulsados a su país sin el acompañamiento de sus padres, el responsable de Solidaridad Fronteriza aclaró que en las labores de observación que realizan no han observado esta situación.
Toribio indicó que lo que sí existe son redes integradas por haitianos y dominicanos que se están dedicando a traficar con niños y adolescentes desde el vecino país de Haití.
De su lado, el presidente de la Comisión Dominicana de los Derechos Humanos en la zona norte del país, Dionisio Jérez, en declaraciones a Efe, reconoció que hay avances importantes en el proceso de repatriación de extranjeros que viven de manera ilegal en este país, pero, «hay cosas que todavía hay que mejorar».
«Nuestra Comisión ha sido coherente al señalar que la República Dominicana tiene soberanía para decidir mediante sus leyes, quienes pueden entrar y vivir en su país», indicó Jérez.
Con relación al proceso de regularización de extranjeros indocumentados, consideró que ese plan es «importante», porque le dio oportunidad a esas personas a obtener sus documentos.
«Y los que no lo hicieron, es lógico que se exponen en cualquier momento a su arresto y posterior deportación», observó.
Asimismo, planteó al gobierno de Haití que proteja a su niñez y que tome acciones para evitar el tráfico de personas por su frontera, aunque admitió las limitaciones que tienen las autoridades de la vecina nación.
En tanto, el activista de derechos humanos haitiano Samuel Simons, declaró a medios locales que en las observaciones que hacen sobre el proceso de deportación de sus compatriotas en la franja fronteriza, no tiene quejas de violaciones a los derechos humanos.
También observó que las autoridades dominicanas y haitianas tienen que trabajar en conjunto para perseguir y apresar a los integrantes de redes de los dos países que se están dedicando al tráfico de niños desde Haití hasta territorio dominicano.
Autoridades militares y migratorias apostadas en la frontera negaron que estén devolviendo niños sin el acompañamiento de sus padres.
Una fuente castrense reveló a Efe que Migración solo devuelve a los menores que se compruebe cruzaron la frontera clandestinamente acompañados de sus padres, pero previo proceso de revisión para determinar su procedencia.
Asimismo, reveló que cuando detectan que esos niños ingresan a territorio dominicano acompañado de particulares, son trasladados a centros especializados, «donde se les ofrece educación, protección alimentaria, de salud y seguridad»
