Santo Domingo.- El jefe de la Policía Nacional, Manuel Castro Castillo, se mostró hoy partidario de que se establezca una prohibición para portar armas de fuego en lugares públicos, con objetivo de reducir el número de muertes por disparo, que en los últimos años aumentó un 63%.
La medida, que también sería de aplicación para el personal del Cuerpo que trabaja en el área administrativa, explicó Castillo durante su participación en un curso especializado para operadores de justicia dirigido a jueces, fiscales y policías del país.
El jefe de la Policía defendió que la prohibición se lleve a cabo «en lugares urbanizados», ya que portar este tipo de arma «induce a los delincuentes a actuar contra los ciudadanos» que las lleva, y también conduce a los ciudadanos más violentos a disparar por cualquier pequeña discusión».