La Voz de Rusia. El presidente de Bolivia, Evo Morales, acusó al Gobierno norteamericano de preparar un ataque contra los países de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), una vez que termine la campaña militar de Washington contra Siria.
El bloque regional ALBA, creado en 2004 por iniciativa de Hugo Chávez para combatir la pobreza y las desigualdades mediante políticas de izquierda, está conformado por diez estados, entre ellos Venezuela, Bolivia, Ecuador, Cuba y Nicaragua. «Después de tener controlado Oriente Próximo, Europa y África, ya solo le faltan los países de América Latina que conformamos el ALBA», advirtió el mandatario boliviano en un acto con dirigentes de la Central Obrera Boliviana (COB), la mayor sindical del país:
–Deberíamos estar aquí planificando, compañeros de la COB, junto a la comunidad internacional, qué castigo o qué demanda debemos hacer al presidente Obama que tanto daño está haciendo en el mundo, intervención militar, masacre, genocidio. Sigo convencido de que lo que hace el Gobierno de Estados Unidos a la cabeza de Obama es cometer delitos de lesa humanidad.
Morales se mostró convencido de que la administración Obama financia a los rebeldes en Siria para provocar más violencia en ese país y justificar así una intervención militar, con el fin de apoderarse de sus recursos naturales. «Tenemos la obligación de identificar a los enemigos internos y externos; esos enemigos que están invadiendo países. Esa debería ser nuestra responsabilidad», subrayó Morales.
Mientras tanto, desde el aeropuerto internacional Simón Bolívar en Venezuela partió rumbo a Líbano un avión del ALBA con ayuda humanitaria para los refugiados sirios. Elías Jaua, canciller de la República Bolivariana, comentó a los periodistas este gesto de la Alianza:
–Es un gesto de paz, de vida, de solidaridad, que busca hacer un llamado a la reflexión de quienes tienen la capacidad de detener la guerra. Nosotros estamos entusiasmados porque se ha abierto una luz en la oscuridad. La propuesta del Gobierno de la Federación Rusa, del presidente Vladímir Putin, la cual respalda plenamente el presidente Maduro, con el aval del Gobierno de la República Árabe Siria, es un camino para los que tienen apretados los botones para descargar las bombas sobre el pueblo sirio, se detengan.
La propuesta de Moscú de poner bajo control internacional las armas químicas sirias también la apoyó el Gobierno de Guatemala. A través de un comunicado ha saludado las negociaciones sobre el tema entre el canciller ruso, Serguéi Lavrov, y su homólogo estadounidense, John Kerry, que hoy se han llevado a cabo en Ginebra. Los ministros acordaron proseguir las conversaciones a finales de septiempre con el fin de fijar entonces una fecha para celebrar una conferencia de paz para Siria. «La evolución de los hechos ha venido a confirmar algunos puntos señalados por nuestro Gobierno anteriormente. En primer lugar, que cualquier acción de carácter militar debe ser comprendida en el marco de una solución política a la crisis en Siria», señaló la Presidencia de Guatemala.
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