Buenos Aires, (EFE).- Charly García, el rockero argentino más conocido en toda América Latina, debutará el próximo septiembre en el Teatro Colón de Buenos Aires con una apuesta por el poder de unión de la música, escenificada en un recital en el que estará acompañado por su banda y una orquesta sinfónica de 52 músicos.
El emblemático teatro lírico de la capital argentina acogerá dos conciertos, cuyos boletos salieron este jueves a la venta y en los que García dirigirá a la orquesta y a su banda, «The Prostitution», para ofrecer al público una versión sinfónica de «Líneas paralelas-Artificio imposible».
García dijo anoche en una entrevista en un canal de televisión argentino que estos conciertos quieren ser un ejemplo del poder de unión a través de la música.
«Quiero que la música sea la protagonista, el pivote para que las distintas corrientes de pensamiento se olviden de todo y se unan en la música», afirmó el músico.
El cantautor aseguró que «apropiarse de la música y ponerla a trabajar para uno» no fue lo que pretendían los primeros que se pusieron a juntar notas y añadió que los compositores clásicos, como Mozart, «no lo hacían por dinero».
«Chopin me encanta», dijo García y lo señaló como uno de sus compositores favoritos.
García habló de su relación con otros iconos musicales de Argentina como Luis Alberto Spinetta, Palito Ortega y Mercedes Sosa, que han marcado su trayectoria personal.
Sin embargo, en cuanto a sus influencias respecto a la puesta en escena y forma de vestir, el rockero se refirió a figuras de la música anglosajona -como el fallecido miembro fundador de The Rolling Stones Brian Jones- que le sirvieron de influencia para definir, por ejemplo, su vestuario.
García también habló del impacto que le causaron la muerte de su hermano y de su padre, un físico, químico y matemático, autor de libros de texto y dueño de una fábrica de formica.
«Líneas paralelas» se presentará en el Colón el 23 y el 30 de septiembre próximo en versión sinfónica, ejecutada por una orquesta de 52 instrumentos.
La puesta en escena, dividida en dos actos y con una duración aproximada de dos horas, contará con escenografía y vestuarios a cargo de Renata Schussheim.
García, de 61 años, fue designado el pasado julio «embajador cultural» de Buenos Aires por decisión del alcalde de la ciudad, Mauricio Macri, en reconocimiento a su trayectoria artística. EFE
