Madrid, (EFE).- Bruce Springsteen se planta en el inmenso escenario de Hyde Park escoltado por su grupo de siempre, la E Street Band, y se pone a aullar las estrofas de «London calling», de los Clash. Así comienza el DVD que muestra cómo el Boss conquistó Londres.
«London calling: Live in Hyde Park», que acaba de publicarse, recoge en toda su intensidad el concierto que Springsteen ofreció el 28 de junio de 2009 en el festival Hard Rock Calling.
Son casi tres horas de grabación reunidas en dos DVD que dejan constancia de la gran actividad que el músico de Nueva Jersey y sus camaradas despliegan en el escenario.
La actuación formaba parte de la gira europea con la que Springsteen presentó su último álbum, «Working on a dream», y que pasó también por varias ciudades españolas (Sevilla, Bilbao, Valladolid, Santiago de Compostela y Benidorm).
El repertorio de los conciertos indica que el Boss y los suyos utilizaron la presentación del nuevo disco como excusa para recorrer los escenarios de todo el mundo, ya que en los conciertos de la gira los temas de «Working on a dream» estuvieron en franca minoría y en este DVD sólo se escuchan dos, uno de ellos el que da título al disco.
Las actuaciones se cimentaron en los clásicos de la discografía de Springsteen. Álbumes como «Born to run» -que, aparte de sus temas más célebres, aporta «Night», «She’s the one» o «Jungleland»-, «Born in the USA» o «Darkness on the edge of town».
El concierto de Londres no fue una excepción, aunque el Boss incluyó una novedad en Hyde Park: justo al comienzo de la actuación, con los rayos del sol aún sobre el público, Springsteen sorprendió con una espectacular versión de «London calling».
Fue todo un guiño a la audiencia londinense, para la que el himno de los Clash es toda una referencia. Con el público de su parte desde el primer tema, Springsteen y la E Street Band encadenaron una descarga tras otra de rock and roll, desde «Badlands» hasta «Dancing in the dark», hasta completar 27 temas.
Entre ellos hay, aparte de «London calling», otras versiones a las que los fieles del Boss están más acostumbrados, como «Trapped» o «Raise your hand», que el músico norteamericano y su banda llevan interpretando desde hace años.
El concierto de Hyde Park fue aclamado por la crítica y contribuyó a actualizar la imagen que sobre Springsteen tenía el público británico, y que se parecía más a la del rockero que triunfó a mediados de los ochenta con «Born in the USA».
Aquella actuación fue la primera ofrecida por el músico norteamericano en un festival fuera de Estados Unidos en sus casi cuarenta años de carrera y contó con la participación del grupo The Gaslight Anthem.
El cantante de esta banda, Brian Fallon, compartió el escenario con el Boss para interpretar con él «No surrender».
El resultado de la grabación del concierto fue tan satisfactorio que en los cines norteamericanos se ha estrenado una versión reducida de noventa minutos.
